Archivo de la categoría: Navarra

«No sé si soy poeta o una persona que dice algo»

La poetisa Ana María Lorenzo prepara un año cargado de lanzamientos literarios y su salto a la narrativa 

 

imagesPara comenzar ¿podría hablarnos por el momento en qué se dio cuenta de que tenía una vena literaria?
No me dí cuenta. Nací con un lápiz en las manos. Con 6 y 7 años, ya escribía mis primeros cuentos y poesías que dedicaba a mi abuela. Con 9 años, escribí a máquina mi primera obra de teatro… No sé qué pasaría con ella. Acabaría en la basura.

¿Contó con el apoyo de sus familiares cuando le comentó que quería ser escritora?
Tuve la fortuna de nacer en una familia de intelectuales. Todos  de ciencias menos yo, que era de letras. Con muy corta edad, mis padres lo vieron muy claro. Yo había nacido para escribir.

Compartir lo que uno escribe con los amigos y la familia es fácil porque hay confianza y serán benévolos. ¿Cómo lleva someterse a la crítica de lectores desconocidos?
Escribo porque me gusta, gozo con ello; forma parte de mi personalidad. Todos saben que “contra gustos y colores, no hay discusión”. Normal es que haya gente que no le guste cómo escribo, al igual que otras disfruten leyéndome. Una crítica, siempre es buena. Te ayuda a avanzar.

Ha trabajado géneros muy diversos, pero suele recurrir a la poesía. ¿Qué le aporta este género que los otros no?La poesía ha sido un puntal clave en mi existencia. En mi vida ha habido un antes y un después del año 1998,  en el cual sufrí un derrame cerebral que me afectó al área intelectual. Se me olvidó leer, escribir, la retentiva me fallaba, me costaba entender lo que me decían…  Durante años tuve que  trabajar muchas horas para poder volver a sentirme un poco yo. Pero, no lo descubrí hasta que entré de lleno en el mundo de la poesía. La retentiva todavía me falla, los poemas me ayudan a escribir en pocas letras lo que siento por cualquier cosa, mis fantasías, reflexiones… Es un reflejo de mi vida, un profundo caos con sentido y orden.  Tiempos duros, difíciles que fueron salvados gracias a esos cortos versos donde observaba que aún valía para algo. ¿Qué me aporta la poesía?: Vida. Lee el resto de esta entrada

Rasha Mayka Baghdadi y Alejandra López escribieron de manera conjunta “El mundo de Agartha”

Son las dos escritoras más jóvenes de Navarra que publican un libro. Está a la venta también en Japón.

Rasha Mayka Baghdadi nació en Pamplona hace 24 años y es descendiente de padre jordano y madre navarra. Estudió Ingeniera Mecánica y colabora en el negocio de sus padres dedicado a la moda. Persona con mucha imaginación, enamorada del arte y de las últimas tecnologías, le encantan las ciencias, y por supuesto leer.
Alejandra López nació en Pamplona donde vivió y creció rodeada de unos padres maravillosos y dos hermanos pequeños bastante trastos. Tiene 24 años y estudió Comercio y Marketing en Pamplona y hace un año se trasladó a Barcelona donde actualmente trabaja.

Por: Alberto Berenguer    Twitter: @tukoberenguer

¿Desde cuándo se conocen Rasha y Alejandra?
RMB: Nos conocemos desde el colegio, cuando a los dieciséis años me cambie de colegio a Carmelitas Vedruna donde ya estudiaba Alejandra.

¿Cómo surgió vuestra novela El mundo de Agartha?
AL: Estábamos sentadas en la terraza de un bar tomando unos batidos de chocolate cuando se nos ocurrió el argumento del libro: ¿Qué pasaría si un día cambiaras de mundo por accidente? Las ideas se agolparon en nuestras mentes y de ellas salieron los protagonistas, los escenarios, ¿Cómo sería en inicio del libro? ¿Qué envolvería a la protagonista? Todo fue surgiendo como un torrente…

Una particularidad de El mundo de Agartha consiste en el hecho de haber escrito dos personas de manera conjunta una novela, ¿resulta complicado trabajar a cuatro manos?
RMB: Mucha gente nos lo pregunta quizá porque piensan que al tener ideas diferentes se complica el hecho de llegar a un acuerdo pero sucede al contrario, el tener dos mentes pensantes si se organiza bien y si te llevas bien aporta mucho más a la novela, hace que sea más completa. Ayuda mucho tener dos puntos de vista, y cuando una se atasca la otra puede continuar, de esta forma la novela no se queda en el olvido. Lee el resto de esta entrada